El uso de unos neumáticos demasiado gastados es peligroso, por lo que se debe controlar regularmente su estado. Con nuestra guía aprenderás, entre otras cosas, a qué se debe prestar atención en el uso diario y cómo medir la banda de rodadura del neumático.
Unos neumáticos gastados, y aún más los agrietados, no son aptos para el uso.
¿Qué neumáticos están gastados?
los neumáticos que tienen daños que impiden su posterior uso
los neumáticos deteriorados, que debido a su edad no son aptos para su posterior utilización
aquellos en los que se ha alcanzado el grosor permitido de la banda de rodadura
¿Qué tipo de desgaste excluye a los neumáticos para su posterior uso?
un neumático con una banda de rodadura de menos de 1,6 milímetros
la separación de los elementos, incluyendo el despegado de la banda de rodadura
la deformación o el descubrimiento del aro del talón (el elemento sobre el que la goma se monta en la llanta)
manchas, rozaduras en el interior del neumático en la capa butílica
protuberancias, deformaciones en el flanco relacionadas con una rotura de los alambres de la carcasa
cualquier corte o desgarro de la goma (incluso superficial)
Si observamos cualquiera de los anteriores síntomas es necesario pedir la opinión de un taller profesional. La banda de rodadura, tanto de los neumáticos de verano como de los de invierno, debe comprobarse regularmente. Hay que tener en cuenta que el desgaste de los neumáticos por la parte interior es también un problema. Por ese motivo la verificación de los neumáticos debería tener lugar al menos una vez por temporada.
¿Cuáles son los tipos de desgaste de los neumáticos y cómo podemos reconocerlos?
Podemos mencionar los siguientes tipos de desgaste de la banda de rodadura:
desgaste normal: aparece cuando la goma se desgasta de forma regular, en toda su anchura y en el contorno,
desgaste asimétrico: es decir, un desgaste desigual de los neumáticos. Se presenta cuando una de las partes se deteriora más rápidamente que la otra o es evidente un desgaste excesivo en uno de los bordes. Esto puede estar relacionado con una alineación incorrecta de las ruedas,
desgaste circular (de los hombros): se manifiesta mediante una mayor altura de la banda de rodadura en el centro que en los hombros,
desgaste central (cóncavo): tiene lugar cuando viajamos con una presión demasiado alta en las ruedas. La zona de contacto está limitada a la parte central
de la banda de rodadura, o que provoca un rápido desgaste de esta zona. Esto puede ser provocado, por ejemplo, por un frenazo brusco y un bloqueo de las ruedas en el caso de automóviles no equipados con ABS, o bien por problemas con la calidad de un determinado neumático.
desgaste local,
desgaste en forma de dientes de sierra.
Neumáticos desgastados en forma de dientes de sierra - síntomas
Una forma de desgaste que se presenta con frecuencia es en forma de dientes de sierra. Se manifiesta mediante un desgaste irregular de los tacos de la banda de rodadura, que adquieren la forma de dientes. Son visibles y perceptibles al tocarlos con la mano. Se trata de un fenómeno en principio inevitable, aunque su intensidad puede ser diferente y depende de numerosos factores, tales como:
la adaptación de un modelo concreto de neumático al automóvil y su tipo de suspensión,
una presión y una carga indebidas del vehículo,
unos índices mal elegidos: de velocidad y de capacidad de carga para el automóvil,
el estado de los elementos de la suspensión.
Unos neumáticos con unos dientes de sierra marcados pueden ser molestos durante su uso, debido al ruido y las vibraciones generados. Para reducir la escala del problema merece rotar las ruedas cada 10 000 km, comprobar la presión y la carga adecuadas, así como cuidar el estado de los elementos de la suspensión.
La profundidad de la banda de rodadura y las propiedades de tracción del neumático
Un neumático con la profundidad mínima permitida es incomparablemente peor que uno con la banda de rodadura completa, sobre todo si se trata del fenómeno del aquaplaning y la maniobrabilidad sobre un pavimento mojado.
La profundidad admisible de la banda de rodadura en los neumáticos, que vale 1,6 milímetros, garantiza sobre un pavimento mojado solo el 40% de la adherencia de un neumático nuevo. Debido a esto, el grosor recomendado de la banda de rodadura del neumático de verano es diferente al de la banda de rodadura permitida del neumático de invierno.
Altura mínima de la banda de rodadura del neumático de invierno y de verano
Para que el neumático sea seguro es necesario controlar regularmente la banda de rodadura. Encontrarás indicadores en los neumáticos en seis lugares marcados con las iniciales TWI (Treadwear Indicator). Indican el desgaste permitido de la banda de rodadura del neumático, igual a 1,6 milímetros. Cuando la altura de los tacos llega al nivel del indicador se deben cambiar los neumáticos por unos nuevos.
¿Cómo medir la banda de rodadura del neumático? La medición exacta del TWI del neumático puede realizarse mediante reglas especiales, así como mediante una moneda o una cerilla.
Indicador de desgaste del neumático - estándares de la marca Continental
La marca Continental emplea en todos sus productos las correspondientes indicaciones de la profundidad de la banda de rodadura. Cada neumático está equipado con un indicador TWI que indica la profundidad mínima permitida por la ley de la banda de rodadura.
Sin embargo, es necesario recordar que este valor fue determinado en los años 90 del siglo XX. Todos los neumáticos del consorcio Continental están equipados con un indicador de desgaste adicional. Los neumáticos de verano con un indicador a una profundidad de 3 mm y los neumáticos de invierno con un indicador de desgaste a un nivel de 4 mm. Esto se debe al hecho de que con la disminución de la profundidad de la banda de rodadura se reduce la capacidad del neumático para evacuar el agua.
Nuestros estudios muestran que el nivel de 3 mm para un neumático de verano es la altura mínima de la banda de rodadura para la cual el neumático garantiza la seguridad al frenar sobre un pavimento mojado. Por debajo de este valor se produce una caída radical del rendimiento del neumático y un aumento drástico de la distancia de frenado. Para un neumático de invierno el indicador marca 4 mm debido al hecho de que un neumático de invierno debe enfrentarse a unas condiciones mucho más difíciles, tales como la nieve o el barro dejado por esta.
Paweł Skrobisz
Jefe del Departamento Técnico
El indicador de desgaste del neumático indica el desgaste permitido de la banda de rodadura del neumático, igual a 1,6 milímetros.
Neumáticos gastados y accidentes
La influencia del desgaste de los neumáticos sobre la seguridad puede estudiarse de dos formas:
en primer lugar: influencia sobre el comportamiento del neumático y sus parámetros. Una banda de rodadura lisa supone una mayor probabilidad de problemas a la hora de controlar el automóvil, especialmente sobre un pavimento mojado, y, por lo tanto, una mayor susceptibilidad al aquaplaning.
en segundo lugar: la probabilidad de accidente, resultante de un mal estado de las ruedas. Se trata aquí de grietas, despegado de la banda de rodadura, salida del neumático de la llanta, etc.
En nuestro portal ya hemos prestado varias veces atención a cuándo se debe realizar el cambio de neumáticos y qué riesgos conlleva circular con unos viejos. ADAC ha calculado que en torno al 7-8% de las intervenciones técnicas prestadas a vehículos inmovilizados en la carretera hacen referencia a daños de los neumáticos. A su vez, los estudios realizados por la organización DEKRA indicaron que el 37% de los accidentes en Alemania, debidos a defectos técnicos de los vehículos, fueron provocados por fallos de los neumáticos.
Para evitar estas desagradables sorpresas en la carretera es mejor controlar detalladamente como mínimo una vez a la semana o al menos antes de un viaje largo el estado de los neumáticos: mediante la medición de la banda de rodadura del neumático y la comprobación del nivel de presión adecuado.
Un neumático gastado puede reventar durante la circulación.
¿Cómo cuidar los neumáticos?
El desgaste de los neumáticos de verano, de invierno o para todo el año depende en gran medida del conductor. El tiempo que circules con ellos y si el motivo de su sustitución será el desgaste de la banda de rodadura o un daño del neumático están relacionados con los siguientes factores:
una presión correcta,
la observación de la carga máxima,
las condiciones de uso (ciudad, carretera, terreno de montaña, número de curvas),
el estilo de circulación, los frenazos bruscos, la aceleración,
el almacenamiento adecuado durante la temporada (condiciones adecuadas, posición),
la evitación de choques violentos con obstáculos (agujeros en la carretera, bordillos),
el control del estado técnico del vehículo (geometría, alienación, estado de la suspensión).
¿Cuándo presentar una reclamación por los neumáticos?
No puede excluirse que un desgaste anormal pueda estar relacionado con defectos de fábrica del neumático. Si sabemos que hemos utilizado las ruedas de forma correcta (respetando la presión recomendada y la carga admisible), el estado de nuestro vehículo es intachable y, a pesar de esto, los neumáticos se deterioran, esto puede sugerir un problema con su calidad. Pueden estar relacionados con esto en particular un desgaste demasiado rápido y cualquier tipo de defecto local.
El control sistemático del estado técnico del automóvil nos protege de sorpresas desagradable en la carretera (fot. Audi).
¿Cuándo se deberían cambiar los neumáticos?
La respuesta a esta pregunta no es única. La necesidad de cambiar los neumáticos depende de varios factores, entre otros, la edad, el estado técnico o simplemente las preferencias individuales del conductor. La comprobación regular de la banda de rodadura de los neumáticos es la base.
La durabilidad de los neumáticos de invierno, para todo el año y de verano es diferente. Los neumáticos de invierno están fabricados con compuestos diferentes, que son menos resistentes al desgaste. Se estima que el kilometraje de los neumáticos de invierno puede ser un 15-30% menor que la de los de verano. Además, estos recorridos pueden acortarse cuando son utilizados a una temperatura superior a los 10ºC. En relación con los neumáticos para todo el año se emplean criterios muy similares y su durabilidad se coloca entre la de los neumáticos de temporada.
El principio más general relativo al uso de neumáticos habla de no utilizar un equipamiento cuya fecha de fabricación haya superado los 10 años. Se puede circular con neumáticos de más de 10 años, pero es mucho más peligroso.
Recordemos que el cuidado del estado técnico de nuestro automóvil no solo es una señal de preocupación por nuestra seguridad, sino también por la de los pasajeros.