Independientemente de si vayamos a realizar un corto viaje en coche o atravesar la galaxia, existen pequeños elementos que influyen en nuestra seguridad. Con frecuencia nos olvidamos de su existencia y, sin embargo, su funcionamiento suele decidir sobre la vida y la salud de las personas. Uno de estos detalles infravalorados son los tornillos de las llantas, que veremos un poco más de cerca.
Los tornillos de las ruedas son cruciales para nuestra seguridad. Su funcionamiento es muy sencillo: fijan la rueda al resto del coche. Aunque si algo va mal, podemos enfrentarnos a diversas situaciones desagradables. Es difícil imaginar lo que puede ocurrir si nuestro coche pierde repentinamente una rueda mientras conducimos a gran velocidad. Aunque este es un ejemplo extremo. Si prestamos atención a la elección y montaje de los tornillos, podremos viajar mucho y felizmente.
¿Cómo elegir los tornillos de las llantas?
Esta es una pregunta que solemos hacernos con frecuencia después de comprar unas llantas nuevas, que nos gustaría disfrutar lo antes posible. También puede aparecer al llegar el momento de sustituir los tornillos oxidados o dañados por otros nuevos.
Una elección adecuada de los tornillos es importante por varios motivos. En primer lugar, si los elegimos mal, no cumplirán su función principal, lo que significa que la llanta no quedará bien fijada al vehículo. En segundo lugar, y esto seguramente interesará a los aficionados a las llantas de aluminio, se trata de evitar arañazos o daños en nuestras valiosas llantas, algo que no es difícil que se produzcan durante su montaje.
Para evitar problemas, antes de ponernos manos a la obra, debemos prestar atención a distintos parámetros:
Tipo de asiento. Dependiendo de la forma de la ranura de montaje de la llanta, hay que utilizar el tornillo adecuado. El plano de montaje puede ser cónico, redondo –también conocido como esférico– o plano. Es fundamental elegir un tornillo adaptado al asiento, es decir, uno cónico para un asiento cónico, y así en todos los casos.
Diámetro y paso de rosca. Estos parámetros pueden variar en función del modelo de automóvil, ya que están relacionados con el cubo. Aparecen como: p. ej., M12 x 1,5. El primer dígito indica el diámetro, y el segundo el paso.
Longitud de trabajo. Este es un valor especialmente importante, ya que determina si la llanta está asentada de forma segura y estable en el cubo. Un tornillo demasiado corto o demasiado largo puede provocar problemas durante el uso, además de reducir nuestra seguridad.
Tamaño de la cabeza – llave. Un parámetro bastante obvio, aunque al que merece la pena prestar atención, ya que, al trabajar con un agujero de montaje estrecho, es muy fácil dañar la superficie de las llantas.
Las tuercas de las llantas de aluminio de los automóviles Toyota o Audi pueden variar: el modelo del coche también tiene importancia.
Sabías que…
Si has comprado unas llantas de aluminio en Oponeo que requieren tornillos diferentes a los montados originalmente en tu coche, recibirás un nuevo juego con tu pedido.
Al comprar en nuestra tienda, también puedes equiparte con un kit de seguridad McGard y tapones para los tornillos y tuercas adicionales para tus llantas. Estas opciones se muestran al entrar en la cesta de la compra.
Tornillos flotantes para llantas
Los tornillos de las llantas originales pueden durar años siempre que no se hayan perdido, dañado o corroído durante su uso. Comprar uno que te falte no será ningún problema; después de todo, tenemos al menos un par de piezas estándar.
La situación cambia cuando se trata de un nuevo juego de llantas. El diámetro y el paso de rosca, dependiendo del cubo y del modelo de coche, seguirán siendo los mismos, pero el resto de los parámetros pueden variar. En este caso será muy importante el uso de distanciadores. Por ello, tanto los tornillos para llantas de acero como para llantas de aluminio deben elegirse con cuidado. Por ejemplo, en las llantas ligeras suelen utilizarse cabezas más pequeñas, lo que facilita el apriete del tornillo sin comprometer el revestimiento de pintura.
A la hora de elegir y montar las llantas debemos recordar que cada milímetro tiene su importancia y no podemos hacer concesiones. Aunque, para facilitar el asunto, existen en el mercado tornillos flotantes para llantas. En cierto modo, resuelven el problema de la diferencia existente entre los orificios de montaje de la nueva llanta y las dimensiones que requiere un automóvil concreto. Si la separación de los orificios del cubo es de 5x112, y queremos montar la llanta en una rueda de 5x114, podemos compensar dicha diferencia en la separación. Aunque esta no podrá exceder los 2 milímetros.
Ten en cuenta que no puedes montar los tornillos estándar si existe diferencia en la separación de los orificios aunque, en caso contrario, es perfectamente aceptable. Si la llanta encaja perfectamente en el cubo, no hay nada que impida el uso de tornillos flotantes.
Pernos y tuercas para llantas
Los tornillos no son el único elemento que podemos utilizar para montar las llantas. Una segunda opción son los pernos para ruedas. En este caso, son las tuercas de seguridad de las llantas de aluminio o acero las que se encargan de estabilizar la estructura. Es una solución muy cómoda, aunque el conductor medio no tiene demasiado acceso a ella.
Los aficionados al automovilismo, a los que les gusta conducir o lo hacen de forma profesional, son los que más utilizan los pernos para llantas. Para ellos, la facilidad y la rapidez al cambiar las ruedas es algo crucial. Además, los orificios de montaje se gastan menos. Si cambiamos las ruedas 2 veces al año, con cada cambio de estación, no lo sentiremos tanto. Aunque, si nos planteamos utilizar esta solución, debemos consultar a un profesional que nos asesore adecuadamente.
Tornillos antirrobo: ¿merecen la pena?
Las llantas de aluminio pueden distinguirse muy fácilmente de los modelos de acero, lo que las hace muy atractivas no solo para otros conductores, sino también, por desgracia, para los ladrones. Sobre todo porque no son baratas y son un producto muy demandado en el mercado de accesorios. Quitar una rueda no es nada complicado para un ladrón con cierta habilidad y, al fin y al cabo, nadie quiere encontrar su coche puesto sobre unos ladrillos. Entonces, ¿qué tornillos para llantas de aleación elegir para evitar el robo?
Las ruedas equipadas con tornillos o tuercas antirrobo para llantas de aluminio son mucho más difíciles de robar. Para quitarlas se necesita una llave especial o un tapón a juego con el conjunto. De lo contrario, la herramienta no agarrará la cabeza del tornillo. Aunque no es la solución ideal, siempre es buena idea utilizar cualquier opción que pueda disuadir a los ladrones.
Los tapones de los tornillos de las ruedas pueden cambiar drásticamente el aspecto de las mismas. Tapones para tornillos de las ruedas, o tuning rápido
Los tornillos o tuercas de las ruedas no son algo de lo más decorativo, aunque, por supuesto, si buscas en internet, encontrarás excepciones con un mejor diseño. Por ello se utilizan tapones especiales para los tornillos y las tuercas de las ruedas que permiten evitar, por ejemplo, el efecto de puntos brillantes en las llantas negras o de color.
Los tapones para los tornillos de las ruedas nos ofrecen muchas posibilidades. Podemos cambiar el color o el diseño, según nuestro gusto. Esto es especialmente importante si cuentas con una llantas de aluminio caras. Los tornillos deben combinar con el conjunto, para no estropear el efecto visual final. En cuanto a las llantas de acero también es una forma rápida de cuidar su aspecto.